Está compuesto por un conjunto de racks que forman calles interiores de carga, con carriles de apoyo para las tarimas y una estructura de gran resistencia que permite almacenar tarimas de gran carga.

Estos racks ofrecen una rentabilidad del 85% del espacio disponible, sin contar con los pasillos entre los racks, y permiten el control riguroso de entradas y salidas.

Además, se puede almacenar tantas referencias como calles de carga haya, y existen dos sistemas de gestión de la carga: el sistema drive-in, con un único pasillo de acceso, y el sistema drive-through, con dos accesos a la carga, uno a cada lado del rack.

Este sistema compacto de almacenamiento es la solución ideal para aquellas cámaras frigoríficas que tienen que aprovechar al máximo el espacio destinado para almacenar sus productos a temperatura controlada.